viernes, 17 de septiembre de 2010

Feliz, feliz no cumpleaños para ti para mi....

Felicidades a todos los que disfrutan del buen fútbol. Seas culé o no, hoy deberías estar de celebración. Por suerte para los españoles Lionel Messi aterrizó en Barcelona hace diez años. Un 17 de septiembre del año 2000 que pasará a la posteridad como "el Día de la Servilleta". Ya que el contrato del mejor jugador de futbol de la historia, discúlpenme Sr. Maradona, Sr. Pelé, Sr. Cruyff, Sr. Zidane, Sr. Ronaldo (Luís Nazário de Lima), se realizó en dicho trocito de papel. Y quién podría haber imaginado en ese momento que un pequeñín que no llegaba a un metro veinte de altura se convertiría en lo que es hoy. Es decir, el jugador a batir por el contrario. El jugador a seguir por el compañero. Y es que si existe el cielo, probablemente Messi sea un trocito de él. Pues nadie dribla a un contrario (o a cinco) como él, nadie es capaz de conducir el balón durante 60 metros sin dejar opción al contrario como él, nadie es capaz de hacer gol por cualquier mínimo espacio libre que exista como él.

Con tan solo 23 años ya es artífice y culpable de dos Champions, cuatro Ligas, una Copa del Rey, cuatro Supercopas de España, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubes. Y es que si Messi hubiese vivido todas las eras históricas probablemente sería ese Señor que subió a un grupito de animales a un arca, ese Señor que lideró a unos cuantos soldaditos romanos o ese Señor que descubrió la Penicilina. Porque cualquier seguidor sabe apreciar las maravillas que nos está ofreciendo ese pequeño argentino semana tras semana. Un futbolista al que sólo le podemos reprochar que no sea español de cepa. Pues imagínense señores ese Dios del Fútbol luchando por nuestra selección. Imagínense a Messi compartiendo camiseta con Villa, Xavi, Iniesta, Busquets, Puyol, Piqué...o mejor dejen de imaginar y pónganse a temblar. Porque este es el equipo actual del Barça, un equipazo que da gusto ver jugar.

Ésta es la razón  por la que hoy soplamos las velas, para agradecer que ese pequeñín aterrizara en nuestro país hace diez años. Para agradecer que nos maraville cada fin de semana con su arte y, como no, por mantener la ilusión de los mas pequeños, que sueñan algún día en convertirse en el 10 del Barça, ese loco bajito.